La agencia de prensa EFE dio a conocer que han hallado una nueva diana terapéutica contra el cáncer de mama más agresivo, al cual se
le conoce como “triple negativo” y
que solo se ha tratado con quimioterapia. Este estudio fue publicado en la
revista Nature Medicine, y estuvo dirigido por la investigadora Fara Brasó-Maristany y el oncólogo Andrew Tutt, del King’s College de
Londres.
Estos reconocidos científicos, de la mano de investigadores del
Vall d'Hebron Instituto de Oncología (VHIO),
del Memorial Sloan Kettering Cancer
Center de Nueva York y del Institute
of Cancer Research de Londres; información que se dedicaron a este tipo de
enfermedad por ser la única que no cuenta
con terapias dirigidas, además de ser la que tiene el peor pronóstico.
Así lo dio a conocer Violeta
Serra, investigadora del Grupo de Terapias Experimentales del VHIO y coautora
del estudio, quien explicó que en el punto focal fue el gen PIM1, el cual aparece exaltado en muchos tumores, señal de que
hay presencia de altos niveles de esta
proteína.
Durante los análisis, los científicos inhibieron el PIM1 con un fármaco –que está siendo probado para la
leucemia y el linfoma-, consiguiendo frenar
el crecimiento del tumor y provocando el proceso de apoptosis celular. Esto
fue probado en ratones y midieron su actividad en conjunto con quimioterapia.
Brasó-Maristany afirmó que el trabajo ratifica a este gen
como diana para un nuevo tratamiento: “Cuando se combina este inhibidor con la Eribulina (droga que se usa en
quimioterapia para pacientes con cáncer de mama muy avanzado), las células
tumorales mueren porque este
compuesto potencia el efecto de la
quimioterapia”.
Aunque todavía “este nuevo descubrimiento” se encuentra en
etapa experimental, este estudio otorga muchas esperanzas para la creación de futuros fármacos y tratamientos
más concretos, debido a sus positivos resultados en modelos celulares.
Por Iván Ernesto Moreno Plaza.