Chrono Therapeutics es una empresa norteamericana que ha desarrollado un dispositivo diseñado para ayudar a las personas a dejar de fumar, por medio de la tecnología “wearable” o vestíble, que ahora se pasa a las filas de la salud. Este equipo, que se conecta directamente al teléfono inteligente, tiene la capacidad de registrar los momentos de ansiedad por el cigarrillo, y ayudar a controlarlos, liberando dosis de nicotina, manejadas por un algoritmo previamente estipulado de acuerdo a su intensidad.
Los parches son una herramienta establecidas y probadas en la terapia de reemplazo de nicotina, sin embargo, esta tiene limitaciones.
Este método tiene mayor fuerza a la hora de su aplicación, pero su
efectividad baja durante el día, cuando mengua su potencia, lo que pone a
los fumadores en puertas del riesgo de recaída.
Para paliar este problema, los médicos y científicos han buscado en la
ciencia la respuesta para mejorar los resultados en el proceso de
renunciar a este vicio.
Una aplicación móvil, unida a un revolucionario aditamento, es la forma en que la empresa está llevando la tecnología médica a modernizar en enfoque que se ha usado tradicionalmente para enfrentar este problema. Chrono Therapeutics ha desarrollado una manera de proveer la administración temporizada de fármacos por vía transdérmica;
usando un dispositivo vestíble, el aparato, ofrecerá una mejor manera
para liberar a los fumadores de las ansias de nicotina, y al final,
dejar este hábito.
La combinación de tecnologías, bandera de esta compañía, ha sumado a su equipo, especialistas con experiencia en equipos médicos, tecnología de la información, farmaceutas y diseño, aunque siempre han manejado el concepto de la tecnología wearable,
la cual evolucionó para esta iniciativa de un artefacto al estilo de
un reloj de pulsera, hasta el elegante equipo que presentan hoy, y que
ha conseguido grandes reconocimientos desde los primeros días de su lanzamiento.
Guy Dipierro, fundador de Chrono Therapeutics, primero pensó en el desarrollo de esta idea luego de una tragedia personal que culminó en la muerte de un familiar por cáncer de pulmón. El empresario ha trabajado en la creación de una tecnología efectiva y de uso sencillo por los últimos 10 años, consiguiendo el apoyo de entes como la Universidad de Base en Suiza, y conseguido financiación de hasta por 2.3 millones de dólares por parte de The National Cancer Institute (NCI).